El extraño caso de Carlos Soria
Esta primavera el alpinista Carlos Soria atacará el Lhotse, la cuarta montaña más alta del mundo. Este encabezamiento tiene poco de excepcional si no fuera porque Soria tiene 72 años y el Lhotse puede ser su undécimo ochomil. No existe en la historia del alpinismo un caso de longevidad comparable al de Carlos Soria. Nacido cuando aún no había acabado la guerra civil, el alpinista madrileño lleva casi 60 años escalando y ha tenido tiempo de criar cuatro hijas, llevar una tapicería y formar parte de decenas de expediciones a las cordilleras más altas del mundo. Otro hecho curioso es que su primer ochomil, el Nanga Parbat, lo encumbró a la edad de 52 años y a partir de ahí su actividad se multiplicó y no tiene visos de detenerse hasta completar los 14 ochomiles si la suerte y la salud le siguen acompañando. Informe Robinson presenta el testimonio vivo de la energía, la vitalidad y la pasión más puras en la figura de un alpinista de 72 años cuyo motor, según sus palabras es "querer mucho lo que hago".
Fuente: Canal+
Hay gente en la vida que no se pone limitaciones, que cuando deciden hacer algo, lo hacen sin pensar en que no serán capaces de hacerlo. Ese tipo de gente es la que da ejemplo a otras tantas personas que cada día descubren que cualquier cosa que se propongan, pueden conseguirlo.
Impresionante la trayectoria de Carlos Soria, de como la convicción y las ganas de conseguir su gran ilusión, su gran sueño, hacen que este hombre sea capaz de subir a mas de 8.000mt con su edad, digno de admirar.
Me quedo con sus últimas palabras: "Lo importante es que tú estés convencido de lo que quieres hacer".
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